Literatura fantástica

Sagas de fantasía con protagonistas magos

A raíz de la anterior entrada, acerca del origen de los magos, he pensado describir en este artículo las sagas de fantasía juvenil con protagonistas magos que he leído. También he leído novelas autoconclusivas con magos, pero he preferido centrarme aquí en trilogías o sagas. No incluyo El señor de los anillos porque no la considero una obra juvenil.

Historias de Terramar de Úrsula K. Le Guin

Cuentos de Terramar (película de Ghibli)

Esta me encantó, tanto, que cuando la terminé me entró un bloqueo lector y no había libro que me enganchara a leer, ni siquiera de la propia autora. Tardé cuatro meses en recuperar el enganche a la lectura (lo hice con Julia Navarro) y en ese tiempo me dediqué a leer libros de desarrollo personal.

Supe de esta serie de novelas cortas gracias a la película de Ghibli, Cuentos de Terramar, que también me encantó, y quise leer las obras que inspiraron a Hayao Miyazaki. Mis favoritas son la primera, Un mago de Terramar, y la última, Tehanu. Aunque le sigue de cerca La costa más lejana.

Leyendas de la Dragonlance de Margaret Weis y Tracy Hickman

Dragonlance

Llegué a esta trilogía buscando novelas de fantasía épica que leer. Hasta la fecha apenas había leído una o dos novelas de ambientación medieval, así que la lectura de esta trilogía me absorvió por completo. ¿Quién no ha leído y disfrutado con las aventuras de estos personajes encabezados por Raistlin Majere? Aunque mi favorito es Tasslehoff, el kender

Harry Potter de J. K. Rowling

Harry Potter y la piedra filosofal

¿Qué puedo decir a estas alturas que no se haya dicho del famoso niño mago? Disfruté la saga como si fuera una niña más, a pesar de leerla cercana a los cuarenta años. J. K. Rowling creó un sistema de magia precioso y original (todo lo referente a las varitas me parece fascinante). Además, creo que fue la primera vez, o de las pocas, que la magia no es un sistema peligroso y reservado a unos cuantos. 

En el universo de Harry Potter la magia la pueden hacer niños y, aunque existe magia negra y peligrosa, también se utiliza la magia para crear cosas divertidas, bromas, hechizos sencillos incluso bellos. Para mí esto es uno de los principales encantos de la saga, además de presentarnos con esta historia un cuento de hadas moderno.

El nombre del viento (Crónica del asesino de reyes) de Patrick Rothfuss

El nombre del viento

Solo me leí el primer libro y no entendí por qué titulan esta serie Crónicas del asesino de reyes. Que yo sepa, Kvothe no ha matado a ningún rey, al menos en el primer libro. Me recordó mucho al universo de magia de Harry Potter (aquí existe una Universidad de los magos en lugar de Hogwarts) y a Historias de Terramar por el uso de la palabra como fuente de poder.

Como novedad, el autor crea un sistema de magia basado en la simpatía, es decir, en las relaciones armónicas o concomitantes de los elementos. El mago tiene que buscar una concordancia entre el elemento que quiere usar como fuente de poder y aquello que quiere transformar o moldear. Creo que ha tomado la idea de las vibraciones armónicas del sonido y por eso la música está muy presente en esta obra.

Crónicas del mago negro de Trudi Canavan

Crónicas del mago negro

Se compone de tres novelas y debo confesar que no me la terminé de leer, me faltó terminar la tercera. El segundo libro sí me pareció muy bueno. Pero tantos giros quería pegar la autora a lo largo de la trama que, cuando llegué a la última parte, me aburrió porque perdió la credibilidad.

Aquí los magos tienen un protagonismo absoluto. Se describe el gremio al que forman parte y la academia donde enseñan y forman a los aprendices de mago. A partir del segundo libro, el mundo de la novela se expande al mostrar otros lugares fuera del gremio que tienen magia y otras formas de utilizarla.

Como curiosidad, la portada del tercer libro fue la que me inspiró una novela de fantasía épica que se convirtió en la «niña de mis ojos». Por eso guardo especial cariño a esta trilogía, aunque no me la terminara.

Sombras de magia de V. E. Schwab

Kell y Lila, de Sombras de magia

El primer libro de esta trilogía (Una magia más oscura) me pareció un soplo de aire fresco en la fantasía con magos. La ambientación victoriana steampunk, la originalidad de los Londres paralelos por los que Kell y unos pocos más pueden viajar, unido a una magia singular vinculada a los elementos, son los motivos por los que recomiendo esta trilogía. Me leí los tres, pero el primero fue el que más me gustó.

Sé que la entrada podría dar para más libros, pero he querido centrarme en sagas o trilogías que haya leído. Si tenéis curiosidad por más listas de sagas de fantasía juvenil, os recomiendo echarle un vistazo a la de Ana González Duque: las mejores sagas de la literatura fantástica juvenil.

¿Y vosotros? ¿Me recomendáis alguna que no haya mencionado? ¡Os leo en comentarios!

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